Ha ganado cinco de las siete carreras disputadas en el presente Mundial (sólo China y Canadá, en manos de Hamilton y Button, se le escaparon), pero Sebastian Vettel no se fía. Ni siquiera con los 60 puntos sobre Button. Y en Valencia tiene claros cuáles son los peligros, afirmando que "la calificación será vital". Un dato: sólo en Montmeló (Webber) se le escapó la pole al alemán. Sabe de lo que habla.
El año pasado, Vettel se impuso en Valencia, con los dos McLaren escoltándole en el podio. Ganó y disfrutó, incluso con lo que ocurría fuera de la pista: "El ambiente que se vive en el puerto de Valencia es parecido al de Mónaco, excepto por el 'paddock' y los garajes.
que son más grandes". El RB7, que a partir de Silverstone (10 de julio) no podrá seguir sacando provecho a los escapes sopladores, será el monoplaza a batir en un trazado que Vettel califica de "difícil". "Es un circuito urbano, sí, pero la velocidad media (200 km/h) es extremadamente alta, así que resulta muy complicado".
La aerodinámica, una de las virtudes del Red Bull, puede jugar un papel importante en Valencia, donde "necesitas mucho de tu alerón en las curvas y algo menos para las rectas relativamente largas", apunta Vettel
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